Llega el frío y con él caen las hojas de los árboles y arbustos caducos. La desnudez de sus ramas llama poderosamente la cuchilla de la tijera, que cercenará parte de sus ramas. Tijeras, serruchos y motosierras manejados por los que se llaman podadores. Pocas veces se adivina una mano diestra detrás de esas “podas”.
Todos sabemos cortar, eso si, pero de allí a equilibrar, formar o limpiar una árbol o arbusto hay un gran trecho.
Foto de una morera, que ha sido totalmente mutilada y esta no tiene limitaciones espaciales para su crecimiento, su cruz está por encima de la farola, está en medio de un jardín. Nada justifica esto.
En la mente de muchos ronda la idea de que si no se poda un árbol, luego no tira bien o que si se corta, luego crece más vigoroso. ¡Ja, ja..!
El primer principio de la poda consiste en NO PODAR SI NO ES ESTRICTAMENTE NECESARIO.
La poda de determinadas ramas de un árbol es bueno realizarla (cuando están secas, crece una doble guía, el centro posee demasiadas ramas cruzadas, formarlo cuando es joven, ramas enfermas…), pero no sólo es necesario saber que ramas cortar sino además por donde cortar y cómo.
En esta foto se aprecian los labios de cicatrización del árbol, que en su crecimiento en grosor va cerrando la gran herida que le hicieron. El corte se hizo demasiado pegado al tronco y por eso se ve que por arriba y por abajo de la herida le cuesta mas cerrarse.
Muchas veces el diseño inadecuado es el responsable de talas y mutilaciones. Claro está, que los árboles con lo años crecen y se hacen grandes y sus raíces crecen para seguir buscando en el suelo arraigo y alimento, luego hay que darles acero porque el árbol se mete dentro de la casa o estorba el paso o sus raíces están levantando el pavimento o reventando las cañerías.(¿pero no estaban cuando se plantó el árbol?, ¿por qué no se puso otra especie de menor vigor o tamaño?, ¿cómo no se previó?....)
Todo esto para decir que cada vez se poda peor. No se atiende a las necesidades del árbol y eso da mucha pena, con los años que necesita un árbol para desarrollar su esqueleto y poderlo llegar a matar con un mal corte, un corte que no pudo cicatrizar bien y que fue vía de entrada de hongos e insectos que poco a poco van desestructurando al árbol o directamente matarlo.
Cuando veáis gente podando preguntarles porque lo hacen, creo que la mayoría no sabrán darte una contestación lógica.
Foto en la que un corte mal hecho está poniendo en peligro la vida del árbol. La parada de savia que supuso el corte de la rama, derivó en una desecación de la corteza, que dejo el duramen al exterior y ahora es objetivo de insectos minadores y por los agujeros que hacen entrarán los hongos y la pudrición ira avanzando.
¡Con lo que necesitamos a las plantas y la mala vida que les damos!
3 comentarios:
anda, has cambiado de aspecto la página, muy bien, renovación!
oye, dónde puedo comprar unas tijeras de podar políticos?
Los políticos no son árboles, sería mas acertado decir que son una plaga o una enfermedad, la OMS aun no se ha puesto de acuerdo en este punto.
totalmente de acuerdo. Hay a quien le das unas tijeras de poda o una motosierra y se vuelven locos.
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