miércoles, 5 de noviembre de 2014

EL COLOR DE LAS HOJAS EN OTOÑO

Hay distintas hipótesis sobre el cambio de coloración de los árboles en otoño.

Foto cortesia de Enrique Teruel de un Arce opalus

 La teoría clásica habla de un proceso de degradación progresivo de los diferentes compuestos de la hoja, compuestos que en su mayoría son reabsorbidos por la planta, para ser reutilizados en la primavera siguiente. Así el color verde de las hojas se va perdiendo como consecuencia de la desaparición de la clorofila (pigmento de color verde) y deja evidentes otro tipo de pigmentos amarillos o anaranjados de las xantofilas y de los carotenos (naranjas), estos siguen el mismo camino que la clorofila y quedan en algunos casos visibles otros pigmentos como las antocianinas (las flores tienen un elevado contenido de ellas) que son las que dan esos tonos rojos a las hojas.

Foto pepenosela Ginko biloba

 Bajo la premisa de que las plantas no hacen casi nada de forma gratuita, se han investigado con mas detalle el cambio de color de las hojas y han surgido  distintas teorías al respecto:

 Emily M. Habinck, de la Universidad de Carolina del Norte, encontró que en lugares donde el suelo tenía contenidos relativamente bajos de nitrógeno y de otros elementos esenciales, los árboles producían mayor cantidad de los pigmentos rojos (antocianinas). El descubrimiento de Habinck apoya una hipótesis, planteada en el 2003 por el experto en fisiología vegetal William Hoch, para explicar el por qué los árboles se molestan en producir pigmentos rojos. Hoch encontró que si bloqueaba genéticamente la producción de antocianinas en los vegetales de hojas coloreadas de rojo, sus hojas quedaban inusualmente vulnerables a la luz solar del otoño, enviando como consecuencia menos nutrientes a las raíces de los vegetales para su almacenamiento invernal. Para los árboles que crecen en suelos pobres en nutrientes, adquiere sentido entonces el producir más antocianinas, las cuales protegerán durante más tiempo a las hojas, de manera que se puedan recuperar tantos nutrientes como sea posible de las hojas antes de que caiga el invierno

 

Hojas de kaki enrojecidas a finales de octubre

Willian Hamilton, biólogo evolutivo de la Universidad de Oxford, cree que muchos de estos árboles también iniciaron un proceso de evolución a fin de producir hojas rojas caducas para alejar a los insectos, siendo una especie de señal de color.

Pulgones en una adelfa

Principalmente los pulgones eligen árboles para poner sus huevos, parece ser que aquellos árboles con hojas de colores más brillantes y coloradas, están “diciendo” al pulgón: Cuidado que estoy muy fuerte y sano y tu prole lo va a tener claro conmigo. “Vete  poner los huevos a otra parte”.

Habrá que seguir investigando el tema. Lo cierto es que agradecemos a los árboles caducos su espectacular juego de colores en el otoño.






martes, 7 de octubre de 2014

Primer año de apicultor

Hasta hace unos años me dedicaba a ayudar en el manejo de las colmenas a mi amigo Nacho, leer libros de apicultura, acudir a algunas charlas, viajes… pero esta primavera me encontré con ganas de manejar mis propias colmenas.

Colmenar en Abena (Huesca)

Empecé por buscar un paraje adecuado y conté con el apoyo de un estupendo vecino, que me prestó una zona de monte de su propiedad para poner las colmenas.

A finales de abril las diez colmenas con las que he empezado, ya estaban colocadas en su sitio. Eran reinas de primer año.

Detalle de las celdillas con pollo de una semana

He aprendido mucho de los errores cometidos, pues el manejo de las abejas y sus colmenas no es sencillo. He ido controlando periódicamente su evolución y en el camino se me ha ido una colmena de las manos. No está mal para ser el primer año.

El cuadro perfecto, miel y polen por fuera y celdas operculas con futuras abejas en marcha

El mes de septiembre, más seco de lo normal, no ayudó demasiado para que avanzaran lo deprisa que hubiera deseado, miraba las colmenas y desconcertado veía que las abejas seguían trayendo néctar y pólen. El desconcierto venía de no saber de donde procedía, pues la floración era muy escasa. ¡Estos bichos son muy listos!.
Una de los múltiples enemigos de las las abejas, sus primas las avispas

El estar pendiente de las colmenas me hace estar mas pendiente de la flora de la zona y de las épocas en la que florecen, aspecto fundamental para determinar si la zona elegida es la adecuada.

Este otoño extraeremos la miel y tengo muchas ganas de probarla. Tiene que estar riquísima, de echo probé un poco en agosto y estaba deliciosa.

El invierno lo van a pasar en Monegrillo, ya que en el pirineo van a pasar mas frío y la priavera empieza mas tarde y pueden empezar con la flor de romero de Monegrillo y subir mas fuertes al monte. ¡Trashumancia de la buena!.

Es maravilloso el mundo de los polinizadores y me encanta poder contribuir a mejorar la salud del monte con las abejas, si además recojo miel mejor (espero recoger unos 200 kilos de miel).


lunes, 9 de junio de 2014

La oruga de la col y sus depredadores

He tenido la oportunidad de encontrarme esta semana con una auténtica plaga de orugas de la col (Pieris brassicae). Este año al lado de casa han plantado colza, un cultivo oleaginoso, que es de la misma familia que la col, la coliflor u otra crucífera  y por tanto  muy apreciado por estas orugas.


Bonito ejemplar de Pieris brassicae

La colza ha vestido de amarillo los campos durante esta primavera. Se cultiva para recolectar su semilla que contiene un elevado porcentaje de aceites y proteínas. Es una buena alternativa al cultivo intensivo de cereal en los secanos del somontano y del pirineo.

 Las orugas de primera generación, ya bien alimentadas y de buen tamaño (unos 4 cm de longitud), se desplazan del cultivo que han estado devorando, a lugares donde poder pupar y convertirse en mariposas. La gran sorpresa ha sido encontrar a mas del 80% de estos individuos afectados por un parásito muy especial: una pequeña avispa que cuando los gusanos eran pequeñitos, inocularon en su interior un buen número de huevos que se fueron desarrollando junto con la oruga de la col (pueden llegar hasta 150 huevos en una misma oruga).
Oruga de la col invadida de larvas de avispa

Pupa de mariposa de la col que se ha librado del parasitoide.

Al final la avispa siempre gana, termina devorando el interior de la oruga y saliendo las larvas de dentro  y convirtiéndose en pequeñas pupas recubiertas de una seda amarilla que deja como emblema a su víctima sobre ellos. Pupas que darán lugar a nuevas avispillas (Apanteles glomeratus). Estas avispas también atacan a otros tipos de mariposas.

Cadáver de oruga con las avispas en metamorfosis, bajo la seda amarilla

Los adultos de Apanteles se utilizan para el control biológico de plagas, evitando la utilización de insecticidas nocivos para el medio ambiente y para la salud.

Foto gentileza de http://www.monarch.org.nz Eclosión de avispas

Los gorriones que están anidando bajo el tejado, también están dando un buen repaso a las orugas de la col. ¡Todo un mundo!


viernes, 14 de marzo de 2014

TREPADORAS

La lucha social de las plantas por conseguir la luz y colocarse en las mejores situaciones ha sido el caballo de batalla de muchos miles de años, la evolución ha conducido por los caminos mas diversos a las plantas para conseguir la luz.

Las plantas trepadoras han encontrado en sus rivales directos la manera de colocarse por encima de ellos, sin tener que desarrollar grandes tallos. Las estrategias son muchas y diversas:

Sistemas más utilizados:
-         Raíces aéreas, como la hiedra, capaces de meterse por la más fina fisura, hincharse y luego secarse para quedar definitivamente agarradas.
Raíces aéreas de la hiedra
-         Torsión: Muchas plantas han encontrado un tallo voluble, con un tactismo capaz de enrollarse a las plantas vecinas para crecer sobre ellas. Caso de la Madreselva.
-         Ventosas: Como punto curioso hay plantas como la parra virgen (partenocisus quinquefolia), capaces de desarrollar raíces aéreas palmeadas con una pequeña espiralización al final que ejerce las funciones de agarre.

-         Zarcillos: Este sistema es muy bueno y plantas como Passiflora, Vitis…, han creado un apéndice táctil capaz de enrollarse a aquello que esté a su lado. Una vez alcanzado el punto de anclaje, el zarcillo se gira igual que un muelle tensor que lo ajusta todavía más.
-         Espinas: Todos nos hemos pinchado alguna vez con la zarzamora, planta capaz de crecer en casi cualquier sitio y lugar, las espinas crecen hacia atrás, cuando se juntan a un árbol o arbusto próximo, los tallos de la trepadora actúan de clavijas de anclaje. Espinas de doble función: protectora y trepadora.
Espinas de la zarazamora
En esta singular batalla natural, las trepadoras terminan casi siempre ganando la lucha por la luz y en consecuencia dejando a su tutor exhausto o incluso muerto.

domingo, 23 de febrero de 2014

¿Fue un OVNI?

Este sábado 22 de febrero me encontraba en mi pueblo del Pirineo. Mirando al cielo, por la mañana pude disfrutar viendo dos parejas de milanos reales, un ratonero común, un par de águilas que por volar tan alto no pude identificar. A esta lista hay que agregar los petirrojos, gorriones, pinzones, lavanderas, verdecillos, palomas, colirrojos, cuervos, picarazas y hasta un par de picapinos que no pude ver pero si escuchar….






Sobre la expectación de todos ellos el canto inconfundible de las grullas pasando durante toda la mañana y parte de la tarde, bandadas de cientos de grullas encarándose al paso de la gran barrera de los Pirineos, al final pudieron ser varios miles de ellas las que pude observar. ¡Increíble espectáculo, sobre todo por el enorme esfuerzo que realizan estas aves en su migración al norte de Europa!

Grullas a punto de cruzar los Pirineos

Lo mejor estaba por llegar.

Después de cenar salí fuera a contemplar el maravilloso cielo estrellado que dejaba ver un paisaje estelar que desde hace mucho tiempo no observaba. Estaba entretenido en la constelación de Orión y de repente cruzó una estrella fugaz, ¡preciosa, así que por si se cumple, pedí un deseo! y lo más sorprendente no tardó en aparecer, de un color verde esmeralda y con dos grandes puntos de luz a los lados y con forma de montera de torero, algo que jamás había visto. Era de considerable tamaño y descendía rápido dejando una clara estela verdosa.
Me quede a bolos, estuve esperando un rato para ver si se producía algún destello en el choque con la Tierra. Su descenso que duró varios segundos, se producía de forma algo errática. Miré la hora: las 20, 45 horas, dato que intuí me podía servir para ver en las noticias aparecía algún comentario del tema.

Este es un dibujo aproximado de lo que vi.
He pensado en la posibilidad de algún resto de satélite o chatarra espacial, pero en su entrada a la atmósfera se vería de color rojizo o amarillento, ¿pero verde?. No sé, tal vez haya visto aterrizar a una nave extraterrestre en problemas.